lunes, 23 de julio de 2012

Vivir en el sofá

Estamos ya a finales de julio, han pasado 8 meses desde el  20-N, y nada ha mejorado desde entonces, al contrario, todo ha empeorado. El PP no ha cumplido nada de lo prometido (cuánto se equivoca el que dijo lo prometido es deuda), y ha hecho todo lo que decía que no haría, todo lo que criticaba al PSOE cuando estaba en el gobierno.  Ha recortado a lo que podía ser uno de los pilares del crecimiento (la educación), ha recortado los sueldos de los funcionarios, aumentando su horario de trabajo, ha recortado todo lo que ha podido a los que menos tienen, quitando derechos fundamentales, mientras los privilegiados (banqueros, políticos y demás delincuentes) se mantienen impunes y laureados. Y nosotros seguimos en la comodidad del sofá, pegados a la tele y escuchando cuál es el recorte de ese día, como si fuera ya cotidiano, una tradición española.
¿Qué coño nos pasa por la cabeza? Ya sé que ha salido gente a la calle, mineros, funcionarios y demás, pero es que deberíamos estar todos defendiendo nuestros derechos, porque nos están tomando el pelo. Ya no Rajoy, ya no el PP ni el PSOE, que solo son mandados.  Los recortes vienen de más lejos, de una señora alemana, a la que nosotros no hemos elegido, pero que ejerce su dictadura sobre nosotros. Y luego lo llamaremos democracia, tan orgullosos, desde el sofá de nuestra casa, con la tele encendida y una sonrisa de oreja a oreja. Porque así nos dijeron que lo hiciéramos, porque todos estamos manipulados por ellos aunque no nos demos cuenta. Porque es más fácil y más cómodo mirar la televisión que gritar, luchar y pensar.  Es más fácil vivir en el sofá.  

Sé obediente. Estudia, trabaja, cásate, ten hijos, hipotécate, mira la tele, compra muchas cosas. Y sobre todo, no cuestiones jamás lo que te han dicho que tienes que hacer.  
Peter Joseph


lunes, 16 de julio de 2012

Días agridulces


Hay días, aparentemente dulces días de verano, en los que piensas que nada te puede hundir, que nada te va a amargar el día, y te equivocas… Entonces te atacan tus peores miedos, tienes que enfrentarte a lo que habías temido en el interior de tu mente, aquello que te prometías pasado, autoengañándote, pero que sabías que resurgiría. Porque a pesar de todo sigo sin encajar en esta sociedad, y los demás no hacen más que intentar hacérmelo ver. Porque me aburre todo lo que a los demás parece divertirles, porque no soy como ellos, porque sigo siendo quien era y a pesar de creer haber encontrado un lugar en este mundo, sigo igual fuera de la comodidad y la confianza de mis mejores amigos, sigo igual de falto de aptitudes para las relaciones sociales, sigo prefiriendo la compañía de las chicas antes que de los monotemáticos y aburridos adolescentes, y sigo siendo el perfecto pagafantas.  ¡Qué tonto fui al pensar que algo había cambiado! Quizás solo buscaba la diversión, sin preocupaciones ni malos pensamientos, simple y llanamente. Quizás buscaba ser otra persona, disfrutar sin consecuencias. Ahora me doy cuenta que nunca seré uno de ellos... No es algo malo, pero desearía poder vivir la dulzura del verano sin gotas de limón, que ninguna nube se interpusiera en mi cielo azul. Y aquí sigo, mirando al cielo nublado sobre el mar, y esperando días mejores, sin limón.

viernes, 6 de julio de 2012

El círculo vicioso del bullying

Acabo de terminar de ver Ben X, una película que encontré por casualidad en un blog. Hace unos días una señora se nos acercó a mí y a mis amigos ofreciéndonos unos librillos por 3 euros, que estaban vendiendo para evitar que cerraran una escuela de niños discapacitados, con síndrome de down... Compramos varios, y ayer me decidí a buscar en internet sobre esa escuela, que es en cuestión Gea Educadores. Allí encontré una entrada que me enlazaba a otro blog: http://tgd-dejame-en-paz.blogspot.com.es/. El blog trataba sobre los niños con síndrome de Asperger, una especie de autismo. Estos niños no pueden comprender las mentiras, ni los dobles sentidos, ni burlas, ni chistes, ni ironía, ni sarcasmos. Allí se hacía referencia a esa película Ben X.
Ben X nos muestra el sufrimiento y la incomprensión por las que pasa Ben, un adolescente con síndrome de Asperger que necesita comparar su vida con las aventuras de un juego de ordenador para tomar sus decisiones. Debido a las dificultades que tiene Ben para establecer relaciones con sus compañeros las incesantes burlas e insultos de ellos van en aumento.
La película me parece muy original y recomendable, y tiene un final sorprendente, con un giro argumentativo que da que pensar. Además esta película no solo nos muestra las dificultades de los niños con este síndrome, sino un problema aún peor, el acoso a las personas diferentes en las aulas y fuera de ellas, la incomprensión a lo distinto. Como persona que ha pasado por esto durante años que se me hacían eternos puedo decir que el bullying es un círculo vicioso. Cuanto más débiles te vean más atacarán, solo van a por las presas fáciles. Yo era incapaz de defenderme, mi autoestima estaba por los suelos y ellos se aprovechaban de eso. 
Aún hoy, que ha pasado algún tiempo de todo aquello, me pregunto cuál es la razón de todos aquellos ataques. ¿Es tan difícil respetar al diferente, comprender que todos lo somos? ¿Es tan difícil intentar ponerse en la piel del otro? No les guardo rencor por todo lo que me hicieron, pero espero que algún día se den cuenta de ello y por lo menos se arrepientan, aunque no tengo mucha fe que esto pase. Sus cabezas están ofuscadas, están infectados por una enfermedad peor que el síndrome de Asperger, una enfermedad que afecta a una gran parte de la población, y esta es el odio.
Mientras sigamos mirando a otro lado y hagamos como que el acoso no existe, mientras sigamos excluyendo al diferente, mientras fomentemos la mediocridad y critiquemos la originalidad y la creatividad, esta sociedad seguirá igual de enferma...